domingo, 23 de marzo de 2008

Mojadas pascuales

El jueves muy tieso y muy majo, cucarrón renacuajo salio de la casa muy temprano. De nuevo, se encaminó a la Plaza de San Pedro y como no había fila se metió de nuevo en la basilica. Estaba empezando una misa, cuando ¡pum! era con el Papa, asíq ue decidió quedarse y en un puesto bien privilegiado. Una vez salio de allí se montó en el típico bus de turista al cual se podía subir y bajar cuando su sagrada gana del diera, asi que se embarco, o mejor se embuso en el segundo piso del descapotado vehículo, y tamaña mala suerte, pues a los cuatro minutos y 43 segundos empezó a llover..., se bajo en la estación cercana a la Fontana de Trevi..., luego llegó al Coliseo, y ahí se quedo casi toda la tarde...

El viernes este cucarrón tomó un tren de alta velocidad que lo llevo a Florencia (a propósito, ¿cómo va la novela pura sangre?), esa ciudad lo dejó atónico, por sus ojos no cabia tanto arte, tanta historia y allí estuvo todo el día para allá y para aca, con la nuca casi fracturada de tanto mirar para arriba para ver las estatuas, las cupula, las pinturas ¡que maravilla de ciudad!
Sabado, el cucarón mamado decidió quedarse en la casa, visitando los museos de lasallistas y además estaba lloviendo tanto que no daban ganas de salir.

El domingo muy temprano se fue para la Plaza de San Pedro de nuevo para asistir a la eucaristia de resurrección con el Papa, llegó dos horas antes y un buen lugar ocupó. Pero el cielo negro estaba, y la lluvia pronto lo cubrió. Que frio tan macho el que hizo y que empapada que se dio.

1 comentario:

Carolina Castro Parra dijo...

Ay tan rico, osea que estás por Italia... jajaja yo no sé si tu conozcas a Mario Arrieta, amigo de Olga que a ella sí sé que la conoces = que a Frank... pues el también anda por allá, a ver si se encuentran... jajaja